Cuando pensar es el problema


¿Por qué no puedo quitarme este pensamiento de la cabeza? ¿Cómo conseguir liberarme de aquel recuerdo? ¿Podría dejar de preocuparme por lo que pasará? Hay veces que los pensamientos nos molestan, nos crean tensión, miedo, tristeza… y evitarlos se convierte en “misión imposible”, vienen una y otra vez.

Para tratar este tema vamos a empezar imaginando que nuestro cerebro es una casa enorme dividida en tres plantas, en la primera están los recuerdos del pasado, en la segunda están las vivencias del presente y en la tercera está lo que imaginamos del futuro. Nosotras/os decidimos en qué planta estamos en cada momento, dónde ponemos la atención. Además, en cada planta hay varias habitaciones, tantas como aspectos de nuestra vida, personas, actividades, tareas… y también en este caso decidimos dónde situarnos, decidimos en qué pensar. Muchas veces es difícil porque nos abordan pensamientos sin querer, recuerdos, miedos respecto al futuro, y sentimos que no podemos frenar  la mente, que escapa a nuestro control… ¿¿¿QUÉ PODEMOS HACER???

¿¿¿QUÉ PODEMOS HACER???APRENDER A MANEJAR LOS PROPIOS PENSAMIENTOS ES UNA TAREA TAN FACIL O DIFICIL COMO ENTRENARSE PARA UNA CARRERA

Aprender a manejar los propios pensamientos es una tarea tan fácil o difícil como entrenarse para una carrera. Necesitamos dedicarle un rato al día y saber que funcionará, la motivación es muy importante, si no confiamos en el resultado del esfuerzo no habrá esfuerzo. Basta con elegir un sitio cómodo y pensar en algo durante un minuto, después pensar en otra cosa, luego en otra…Es fácil y funciona porque no se trata de evitar el pensamiento (todo lo que reprimimos aparece con más fuerza) sino simplemente movernos de uno a otro, buscando el más agradable. Cada día notaremos más facilidad para pasar de un pensamiento a otro, y así, de esta “tonta” manera, estaremos mejor.

A VECES NOS “ENGANCHAMOS” A PENSAMIENTOS NEGATIVOS, TENEMOS ESA COSTUMBRE, Y CUESTA CAMBIAR

  Como en cualquier entrenamiento, aparecen OBSTÁCULOS, aquí hablamos de RESISTENCIAS. Las personas nos habituamos a pensar de cierta manera, positiva o negativa, (auto)destructiva o constructiva, según los temas, según nuestra historia personal, según muchos factores… No hemos de juzgarlo ni juzgarnos, es algo que pasa. A veces nos enganchamos a pensamientos negativos, tenemos esa costumbre, y cuesta cambiar. Pero es posible, cualquier entrenamiento da resultados si somos constantes. Siempre tenemos la opción de pedir AYUDA PROFESIONAL, alguien que nos entrene para ir por la vida más ligeras/os, sin los pesos de nuestra propia mente.